YAROSLAV Пн июл 01, 2013 12:27 am
17 de octubre
Un mensaje preocupante.
Un delfín hembra, que estaba esperando el nacimiento de su hijo, le dijo a una amiga: -Vuelvo enseguida, va a nacer el bebé - y se marchó.
Los delfines se fueron pasando la noticia: en total, dieciocho delfines repitieron la frase uno tras otro, y el mensaje que le llegó al futuro papá quedó así: «No vuelvo en mi vida, quédate el bebé».
El pobre delfín no salía de su asombro. Cuál no sería su alivio cuando vio venir a su esposa acompañada del bebé. Todavía ahora, cuando recuerdan esta historia, los delfines se mueren de risa.
18 de octubre
La ballena y la medusa.
A la ballena le gusta jugar saltando sobre las olas. Como está bastante gordita, hace mucho ruido al caer. Pero no molesta a nadie, porque tiene cuidado de no salpicar.
Un día se encontró con una medusa. - Buenos días, querida amiga. Me parece que te doy miedo. Pero quédate tranquila, yo no como medusas.
- Tienes razón. Y yo no pico a las ballenas.
- Pero picas a los niños en la playa. Y eso no está bien. Prométeme que no lo volverás a hacer.
- Lo intentaré, pero es que ¡ésa es mi manera de saludar!
19 de octubre
Miedo a los fantasmas.
Conejo Blanco tiene mucho miedo a los fantasmas. Se cree que existen en realidad, y su mamá no consigue hacerle entrar en razón. Un día, la hermanita de Conejo Blanco se puso una sábana en la cabeza y dijo: -¡Uh, uh, uh, soy el fantasma del Bosque!
Conejo Blanco dio un grito y echó a correr como un conejo (cosa normal en un conejo). Sus padres y su hermana le buscaron por todas partes, pero no aparecía. Por fin, a la mañana siguiente lo encontraron atascado en el cubo de la basura, porque no lo había podido abrir y se pasó allí toda la noche.
20 de octubre
El jamón.
El señor Erizo tiene cuatro pelos en la barba y largas púas marrones en la espalda.
Y además es un poco pillo. Si no lo crees, escucha la historia del jamón.
Cierto día se cayó un jamón que estaba colgado, y el señor Erizo se coló en la bodega para cogerlo. El perro le vio entrar y se lo quiso comer allí mismo. Pero el señor Erizo le dijo: -¡No, no, no!
Y le clavó las púas. Después se marchó por la puerta de la bodega, sin olvidar, por supuesto, el sabroso jamón.
21 de octubre
De todos los colores
No me gusta ser cuervo porque mis plumas son negras. Me encantaría ser rojo, amarillo o de cualquier otro color. ¡Qué rabia me da ser un cuervo negro!
Un día encontré un saco de harina que se le había caído al granjero. Lo pinché con el pico, eché a volar ¡y me puse blanco! Pero el viento sopló sobre la harina y volví a ser negro. ¡Vaya fastidio! Ahora, he comprado unos botes de pintura y voy metiendo en ellos la punta de las alas. Como la pintura no se va con el aire, seré un cuervo arco iris.
22 de octubre
Firmado: el avestruz.
«Soy el más grande de todos los pájaros. Peso tanto que no puedo volar, pero corro muy rápido. Además, me trago absolutamente todo lo que encuentro. Vivo en África, en un hermoso país donde reinan los animales. Cuando algo me asusta escondo la cabeza en la arena, creyendo que así no se me ve. Si te subes encima de mí, te levaré muy lejos. Saludaremos a los elefantes, a las jirafas, a las gacelas y, desde lejos, a los leones. Cuando te duermas, cierra los ojos muy fuerte, y haremos ese viaje en sueños. Buenas noches. ¡Hasta pronto!
Firmado: el avestruz».
23 de octubre
Una trampa en el frigorífico.
Turrón, el cerdito rosa, come tanto que se ha puesto gordísimo. ¿Sabes que incluso se levanta por la noche para desvalijar la nevera? Su hermana Manzanilla, para curarle de su mala costumbre, ha decidido ponerle una trampa.
Una noche, Turrón se dirigió a tientas hasta la nevera y la abrió. Había un cuenco con fresas, y se las metió en la boca de un puñado. Entonces sintió algo peludo en la garganta y dio un grito de horror: era una araña..., pero de plástico. ¡Qué susto!
24 de octubre
Los primeros dientes.
Mi papá, el león, tiene unos dientes enormes y ruge tan fuerte que da miedo, pero cuando juega conmigo me trata con suavidad. Y siempre me dice: -Leoncito, todavía eres pequeño y tienes dientes de leche, no puedes hacer daño con ellos.
Una tarde, cuando mi papá dormía la siesta después de haber estado cazando, me acerqué a él por detrás, sin hacer ruido, y le mordí en el anca con todas mis fuerzas.
-¡Grrr...ay, grrr...uy! - rugió mi papá, dando un salto. Ahora ya soy un auténtico león: ¡roarrr!
25 de octubre
¡Qué despistada!
La ardilla despistada estaba muy afligida:
-Todos los otoños me pasa lo mismo. Recojo nueces, bellotas y piñas, y las escondo muy bien. Pero, cuando me despierto después de hibernar, no recuerdo dónde guardé mis reservas.
El señor Búho me aconsejó que hiciera una lista de los escondites, y me regalo un cuaderno. Pero, como soy muy distraída, ¡lo he perdidoю
26 de octubre
Cuidado con el gato.
- Escúchame bien - dijo Mamá Gallina £ su pollito -. Cuando yo era una gallinita pequeña, correteaba por toda la granja, jugando.
Un día, el gato saltó sobre mí para comerme. ¡Qué miedo! Pero mi mama llegó a toda prisa y picó al gato en la nariz. Desde entonces el gato desconfía de las gallinas. Pero, por si acaso, hijito, no te le acerques demasiado.
27 de octubre
Chapa, el salmón.
Después de haber pasado una agradable infancia en el agua límpida de un río, Chapa baja hasta el mar y descubre el agua salada, las olas y las tempestades. Algo inquieto, pero lleno de entusiasmo, el salmón emprende el fabuloso viaje que va a conducirle hasta los límites del horizonte. Mucho más tarde, cuando haya recorrido mares y océanos, Chapa volverá con alegría al río que le vio nacer.
28 de octubre
Botón, el optimista.
A Botón, el tejón, los demás animales le llaman cariñosamente Todo-Va-Bien. Haga calor o frío, nieve o truene, Botón encuentra siempre una razón para alegrarse. Si alguien tiene algún motivo de queja, inmediatamente va a discutirlo con Botón. Unos minutos después, al volver a su casa, luce siempre una gran sonrisa: una vez más, Todo-Va- Bien ha cumplido su optimista misión.
29 de octubre
Un formidable secretario.
La mayoría de los pulpos son unos trabajadores infatigables. Sólo Ventosa no sabe hacer nada con sus ocho tentáculos. Después de reflexionar mucho rato, ha tenido una idea luminosa: se ha anunciado como secretario para todos los animales del océano. Utilizando una tinta negra de su fabricación, nuestro amigo es el único oficinista del mundo que puede escribir cuatro cartas, tres poemas y una palabra de amor al mismo tiempo.
30 de octubre
El sendero de los enamorados.
Cuentan los animales que algunas noches de verano las luciérnagas -los gusanos de luz- se ponen a brillar en Campoverde, con el fin de señalar a los enamorados el camino que deben seguir para encontrarse. Así es como el conejo Caramillo se ha reunido con su encantadora prometida, Camelia.
Pregúntale si esto es verdad, y verás cómo una amplia sonrisa se dibuja en su hocico.
31 de octubre
Ediciones Tejón.
¿Ves a ese tejón que atraviesa Campoverde y entra en el bosque? Por su aspecto, parece que está cansado. Lleva una maleta muy pesada porque, como cada año, el señor Tejón ha hecho un viaje muy largo hasta el mar, para comprar a los pulpos del litoral la mejor tinta. Sin detenerse a descansar, el señor Tejón ahora va a encerrarse, varios días y varias noches, en su taller.
Su trabajo es muy importante: es el impresor del Bosque, y su especialidad son los libros para niños. El señor Búho, que tiene mucha imaginación, redacta los textos. El ratón Plutón se encarga de las ilustraciones, porque maneja pinceles y colores con tanta habilidad como buen gusto, y sabe crear paisajes maravillosos y simpáticos personajes.
Todo el mundo conoce las Ediciones Tejón, y los niños del Bosque de las Maravillas sólo quieren acostarse si su papá y su mamá les leen un cuento.
Gracias al señor Tejón, al señor Búho y al ratón Plutón, cada noche los niños se duermen con la sonrisa en los labios, y en sus sueños reviven tranquilamente unas aventuras alegres y emocionantes.