Alba, gracias. Cada cuento me cuesta aprox. 2 horas para escuchar y teclear. Y una vez más no puedo entender varias palabras
Hace mucho, mucho tiempo el mundo se había una vez azotado por una gran sequía. Era imposible conseguir una sola gota de agua. Todas las criaturas tenían sed, y aquellos que aún tenían fuerzas para desplazarse, buscaban agua desesperadamente. Sin embargo, ¿?? estaban totalmente secos. Había arena por todas partes, y nadie encontraba nada, ni la más mínima fuente. Sólo el Coyote durante una de sus largas andanzas se tropezó con un pequeño lago lleno de agua. El Coyote no dijo nada a nadie y puso una pared alrededor del lago. Allí se arrellanaba detrás de la valla y bebía cuanto le apetecía, permitiendo, eso sí, que algunos de sus parientes más cercanos también bebieran.
- Si pongo un negocio de venta de agua, me haría rico. Sí, umm...no!
La noticia de que el Coyote tenía agua se regó rápidamente, y muy pronto todo ser viviente que podía aún desplazarse, se precipitó hacía el lago.
- ¡Por favor, un poco de agua!
-No. ¡Largo de aquí!
- ¿Y si te traigo comida a cambio de ??? sorbito de agua?
- No me interesa. ¡Fuera! ¡Fuera!
- Tienes el corazón más duro que una piedra.
- ¡Fuera de aquí!
El sufrimiento de los animales aumentaba cada día. Desesperados, se reunieron todos para pensar y decidir, qué debían hacer. De repente, uno de ellos tuvo la idea de pedirle ayuda al Colibrí. Su sabiduría y su habilidad para convencer eran conocidos por todos. El Colibrí no se hizo esperar.
- ¿Ustedes me llamaron?
- Mira, Colibrí, todos nos estamos muriendo de sed.
- Nunca habíamos tenido una sequía tan grande.
- El Coyote tiene agua muy cerca de aquí.
- ¡No me digas!
-Así es. Él tiene mucha agua.
-¡Qué bueno!
-Pero él no deja ni acercarnos.
- El Coyote rodeó el pequeño lago con una pared.
- Él es el único junto con su familia, que puede beber agua.
- ¡Y mientras tanto todos los demás nos morimos de sed!
- ¡Esto no puede ser!
-¡Es una injusticia!
-¡Pues ahora mismo vamos para allá!
...
- ¡Coyote! ¡Coyote!
- ¿Qué pasa? ¿Por qué ese escándalo?
- ¿Es verdad lo que dicen los animales?
- No sé lo que dicen los animales, ni me interesa. Sería un gran dolor de cabeza para mí ocupando de lo que ellos digan.
- Pues, dicen que.. que no quieres darle ni una sola gota a nadie de este lago lleno de agua.
- Sí, es mío, mío, y el agua que tengo me alcanza apenas para mí y mi familia.
- ¿Quieres acaso que todo el mundo se muera de sed?
- Si les doy a los demás aunque sea un poco, yo también tendré sed.
- ¿????????????????????? A ver, Coyote, pongámonos de acuerdo.
- Pongámonos.
- Dales un poco de agua a los animales, ya sabes lo que pasa.
- Ese no es mi problema.
- ¿Acaso tú no sabes lo que es la generosidad? Bueno, te lo explicaré a ti sólo. La generosidad es ...
.. y el agua es como el aire, es de todos, Coyote.
El Coyote se quedó mudo. Los animales salieron disparados con tanta prisa, que tal parecía que sus pies no tocaban el suelo. Se lanzaron en tumulto al lago y bebieron, y bebieron hasta la última gota de sus aguas. Los animales amigos e inclusive los enemigos se estrechaban en fuertes abrazos gritando de felicidad.
-¡Estamos a salvo! ¡Gracias, gracias, Colibrí! Es cierto, el agua es de todos.
El Colibrí convenció al Coyote, y todos los animales bebieron agua. Bueno, aunque algunas aves rezagadas llegaron cuando apenas quedaban unas cuantas gotas de agua, eran en su mayoría lechuzas que a pesar de la contrariedad, no se desanimaron. Por el contrario, recogieron con el pico el lodo frío del fondo del lago, y así regresaron a las montañas, de donde habian venido. Allí, dejaron caer el lodo sobre el suelo rocoso, y donde quiera que caía, surgía el agua tan limpia y pura como los ojos de los niños y las niñas. Los hilos de agua se llevan uniendo hasta formar pequeños arroyos, y más tarde, ríos. Hasta que hubo suficiente agua sobre la tierra. Desde entonces, hay agua para todos los seres, y de mucha mejor calidad, que la del lago del Coyote. Nadie volvió a sufrir sed nunca más, y poco a poco fueron olvidando lo poco generoso que les ha sido el Coyote.