Испанский язык

Quizás alguna vez os cuente una historia "thriller" de como un día ví una pistola apuntada a mi corazón.

Cuenta, cuenta !!!

si! cuenta

¡Vamos a escuchar!

Bueno, pensaba hacerlo más tarde pero si insistís …
Ante todo, quiero advertir a las personas neuróticas que no lean esta historia y que no voy a ser responsable de las consecuencias, si no siguen mi consejo.
Esta historia también se refiere a mi época estudiantil. Rara cosa, parece que todo lo interesante sucedió en aquella época y, actualmente, no me queda nada más que recordarlo.
Bueno, cuando yo estudiaba en el instituto (así se llamaban en aquellos tiempos en Rusia centros de enseñanza superior; actualmente todos los institutos se convirtieron en las universidades y academias que, sin duda, es de más prestigio), pasabamos la instrucción militar y, al acabar los estudios, nos confirieron un grado de teniente.
Una de las disciplinas era la instrucción de combate que incluía ejercicios de tiros.
Un día hacíamos aquellos ejercicios. Le tocó hacerlo a un chico llamado El Gafotas. Tomó la pistola, apuntó al blanco, apretó el gatillo pero no hubo ningún tiro. Entonces aquel imbécil no pudo hacer nada mejor que volverse hacia nosotros con la pistola en la mano y apretando una vez más el gatillo dijo tranquilamente al instructor: "Mi pistola no funciona." Por lo visto se había olvidado de quitar el seguro. Más tarde, cuando discutíamos el asunto, nos juraba que había estado apuntando por encima de nuestras cabezas. Pero en aquel momento, cada uno de nosotros estaba seguro de que estaba apuntando precisamente a su corazón. Al instructor le dio un soponcio. Se puso palidísimo y con los ojos desorbitados le gritó:
" ¡ Arroja la arma al suelo !" Nosotros también le gritamos: "¿ Qué estás haciendo, idiota ? ¿ Quieres matarnos ?" El Gafotas, muy sorprendido de tal pánico, dejó caer la pistola e incluso levantó las manos demosrándonos que no tenía ninguna mala intención. El instructor que ya estaba punzó le dijo: "Chico, te pongo un aprobado pero tú me juras que jamás tocarás las armas. ¿ Vale ?" Claro que El Gafotas aceptó.
Así que todo acabó bien. Ocioso es decir que aquello fue remojado en debida forma. A El Gafotas lo obligamos a organizar una buena juerga y brindamos por haber salido con la vida y por nuestro bautismo de fuego.
Por cierto, a El Gafotas desde entonces todos lo empezaron a llamar El Killer gafudo.
Espero que nadie se haya desmayado.

Me recuerdo mi servicio militar...

Entonces puedes contarnos mucho.
Me parece que, transcurridos años, todo el servicio militar representa una anécdota ¿ verdad ?
Y no depende del país. Los militares son iguales. No es una profesión, sino raza.

Al leer el juramento de amistad eterna a un poste telegrбfico me acordй de lo que le pasу hace aсos a unos conocidos. Realmente era una gente que bebнa mucho. En una ocasiуn estaban en una casa de campo lejos del pueblo mбs cercano. Se pusieron a beber como animales, incluso cuando se les acabу el refresco con el que hacнan los cubatas empezaron a utilizar "fairy" de limуn (detergente para platos) para darle sabor. Al dнa siguiente amanecieron tirados por el campo. Uno al despertar empezу a gritar "no veo, no veo, estoy ciego". Entonces se le acercу el perro que tenнan con ellos y comenzу a lamerle la cara. El borracho consiguiу abrir un ojo y abrazado al cuello del perro empezу a gritar "ЎЎЎ Louliсo, eres mi salvador !!!". Otro de los borrachos, sosteniйndose la cabeza con ambas manos se acercу hasta йl. Entonces descubriу que el "ciego" (o ahora tuerto) no es que perdiera la vista, sino que otro de los borrachos le habнa escupido o vomitado por encima, esto se habнa secado e impedнa que pudiese abrir los ojos. Naturalmente, para el que fue ciego por unos instantes, el perro, Louliсo, era su salvador y le jurу amistad eterna. Al menos hasta que se le pasу la resaca.

Un anEcdono que demuestra lo Util que puede ser el estudio de particuliaridades locales de vocabulario. Con eso se pueden evitar tantos malentendidos...
Un amigo mio y yo decidimos ir juntos al sine. Pero Antes fimos en un cafE para cenar o, mejor decir, almorzar porque era bastante temprano. Era el domingo, entonces nadie pensaba en el trabajo.
De repente llamaron a mi amigo por unos asuntos suyos, y nesesitO apuntar algo, un nombre o un nUmero de telEfono. Por suerte encontrO un papelito en su bolsillo, y, como yo tenIa un bolso enorme en el que deberIa haber de todo, me pediO:
- Dame un lapicero, por favor
-?Un quE?
-Un lapicero.
-?Un quE?
-!Un lapicero!
-?Un quE?
-РУЧКУ!!!
Es que a nosotros sOlo enseNaron su nombre espaNol, "bolIgrafo"...

Quizás algún día os cuente una historia de como los cosmonautas rusos "perdieron" su nave cósmica. Y yo era el testigo de ese acontecimiento.

cuentalo hoy o vas a hacernos morir de curiocidad
y estabas ahi en el espacio para ser testigo?

No, no soy cosmonauta y nunca he estado en el cosmos (por ahora, al menos).
En una época yo iba a veces en comisión de servicio al Centro de control de vuelos cósmicos que se encuentra cerca de Moscú en la ciudad donde vive nuestra colega Tane.
Estando allí, mis compañeros y yo teníamos la posibilidad de escuchar sesiones de radiocomunicación entre el Centro y la estación espacial "Mir".
Un día conectamos la escucha de comunicación, ya que sabíamos que el día anterior llegó a la estación una nueva tripulación. Por lo visto, la sesión acababa de empezar.
"¡ Buenos días !", - dijo el operador del Centro. - "¿ Ya os habéis despertado ?"
"Sólo yo. El piloto en mando y el doctor todavía están dormidos." Comprendimos que era el ingeniero de abordo, un joven que por primera vez llegó a la estación. - "Ayer nos cansamos mucho. Ya sabes, descargamos la nave."
Luego hubo una pausa y el ingeniero dijo:" Pero ¿ dónde está la nave ? No la veo."
"¿ Cómo no la ves ? Está donde debe estar. Acoplada con la estación."
" Pero te digo que no la veo, no la hay" - la voz del ingeniero era alarmada.
"Hombre, yo te digo que según los datos de telemetría la nave está en su debido sitio y funciona bien. Mira mejor."
Luego hubo una pausa más larga y por fin se oyó de nuevo la voz del ingeniero. Esta vez era algo confusa. " Ah, sí. Está acoplada al otro lado de la estación. Me he desorientado un poco. Je, je, je"
Así que todo acabó bien y nadie les robó la nave a nuestros cosmonautas (ni norteamericanos, ni extraterrestres) y a su tiempo ellos volvieron felizmente a la Tierra.

Bueno, puedo volver a repetir las historias ya contadas,...en plan "las batallitas del abuelo"

Aye yo.... estuve con un amigo al que hacía timpo que no veía. Estaba por aquí para ir a la playa y todo eso..., lo que fue más excepcional es que me dijo que desde hace más de un año decidió huir de los inviernos. Así que cuando comienza la primavera está en Madrid. Trabaja unos meses (en algo relacionado con temas de sonido para el cine, sino tiene relacionado con esa actividad,busca otro trabajo). Le pagan bastante bien. Cuando acaba el verano coge un vuelo y se marcha para Argentina. Allí está iniciándose entonces la primavera. Los precios son allí la cuarta parte de los de España. Con algo que lleva ahorrado, vive bien todo el año. Me hablaba de que la vivienda es mucho más barata(incluso comprada). Esto vale para explicar el significado de una expresión "ponerse verde de envidia"