Oyeron entonces una voz que les decía desde dentro de la habitación: ¡adelante, entren!.
Los tres accedieron a la habitación. Su interior les sorprendió. No era un cuarto gris y desangelado como podía imaginarse en aquel entorno, sino que estaba rícamente decorado con mobiliario de caoba, alfombras persas y abundante lujo. Allí se encontraba el padre de Victoria con un personaje con aspecto misterioso. Ambos sostenían tranquilamente en sus manos unas copas de brandy. El padre de Victoria se dirigió a ellos y sin más preámbulos les expuso la situación:
- Como habreis observado hemos tenido unos pequeños problemas. Por suerte, de momento, la situación parece controlada. El proyecto sigue su curso. Les voy a presentar, este es Trofim Trofimovich Lisenko, desde hace tiempo trabaja con nosotros. Ha conseguido grandes logros en sus experimentos. Recientemente obtuvo patatas con sabor a jamón...
- Eso lo venden en el supermercado -interrumpió Victoria-, logrando que su padre le riñiera con la mirada...
...prosigo -continuó-, y ha sido capaz de introducir los genes de membrillo y lechuga en el ser humano...
- Consiguiendo auténticos lechuguinos, se carcajeó Victor...
- ¿Por qué no va a por unos cafés? -le espetó el padre de Vicrtoria-. Bueno, no, mejor quédese, ya irá a por ellos después...
Victor tragó saliva, mientras pensaba "viejo cabrón, ya te daré yo a ti cafés. Vosotros aquí, ricamente, tomando bradis y a cuerpo de rey, mientras yo tengo que hacer el trabajo sucio. Ya llegará el momento, entonces suplicarás, llorarás a mis pies...".
Victor sonrió, perdone suegro, prosiga.
Bien, de momento sólo quería presentaros a nuestro colaborador, para que sepais que es uno de los nuestros y le presteis toda la ayuda que os solicite...
Por cierto, Victor, como ya te indicaba en la carta sería necesario que viajases a África. Si obtienes esa confirmación de tu parentesco podría ser muy útil para nuestros intereses.
Victor meditó "viejo cabrón, me quieres alejar de aquí para sacarme de en medio, pero no te lo pondré fácil", -quizás ahora no sea tan necesaria esa premura, al fin y al cabo los problemas inmediatos creo que han sido eliminados-
-Ummm, es posible -respondió el padre de Victoria-, habrá que ver...